10 rutas de senderismo para hacer en el Centro de Portugal

Situada al oeste del Centro de Portugal, al norte de Lisboa, esta Gran Ruta aprovecha la que se considera la construcción militar europea más eficaz de la historia, capaz de molestar a Napoleón Bonaparte. Concebido hace más de 200 años para defender Lisboa de las invasiones francesas, este peculiar sistema militar está catalogado como monumento nacional desde 2019. 100 estructuras militares, entre fuertes o caminos, que se reparten entre seis municipios. El recorrido pasa por paisajes agrícolas y forestales, mezclando algunos desniveles, y atraviesa colinas y valles, caminos tradicionales y tramos de antiguos caminos militares, algunos utilizados por las tropas portuguesas y británicas. La Gran Ruta tiene varios tramos, siendo el mayor el de Torres Vedras con 112 kilómetros.

El Parque Natural Serras de Aire e Candeeiros es un espacio protegido de 39 mil hectáreas, repartidas por los municipios de Alcobaça y Porto de Mós, en el distrito de Leiria, y también de Alcanena, Ourém, Santarém y Torres Novas, en Ribatejo . En esta zona de gran interés geológico, que cuenta con un vasto patrimonio natural y cultural, existen 16 rutas de senderismo reconocidas por el Instituto para la Conservación de la Naturaleza y los Bosques. Uno de los más pequeños, y por cierto el más bonito, es Olhos de Água do Alviela. Tiene un kilómetro y medio de largo, comienza y termina en la playa del río y además de poder ver su fuente, cerca del final puedes ver el Sumidouro, el punto donde el arroyo penetra en el suelo. Con unos tres kilómetros, la ruta de los Marinhas de Sal de Rio Maior, que llevan ocho siglos de historia, es otra ruta de senderismo muy buscada por la belleza y el paisaje que te acompaña durante toda la experiencia.

La hermosa Serra da Estrela, la más alta de Portugal continental, es el punto de partida de esta Gran Ruta, ya que es el punto donde nace el río Zêrere, denominador común de esta ruta de 370 kilómetros, que nos lleva hasta la desembocadura de este río en Constância, en el distrito de Santarém. El punto de partida es el inolvidable Covão d’Ametade, en el municipio de Manteigas, situado a 1.400 metros de altitud. Los Pueblos de Pizarra, la Presa de Castelo de Bode y el cruce con el río Tajo son otros motivos de interés en esta ruta que atraviesa 13 municipios de los distritos de Guarda, Castelo Branco y Santarém. Además de los senderos peatonales, donde se puede observar la riqueza de la fauna y flora de la región, el sendero tiene la particularidad de poder realizarse en bicicleta o canoa, con circuitos multimodales en cada “etapa”. Hay 13 estaciones intermodales repartidas a lo largo del recorrido, aunque su uso requiere cita previa con los respectivos municipios.

Esta es otra ruta de senderismo muy interesante por el interior del Centro de Portugal que atraviesa 12 Pueblos Históricos, llenos de lugares encantadores con gran significado histórico y cultural, en los distritos de Guarda y Castelo Branco; y Piódão, apodado “Pueblo de los Picapiedra” por el North American Huffington Post, en el distrito de Coimbra. En total, esta Gran Ruta tiene casi 600 kilómetros, dividida en varias etapas. La más corta es la que conecta Idanha-a-Velha con Monsanto, ambas en el municipio de Idanha-a-Nova, en una distancia de 12 kilómetros, y la más larga, que recomendamos que se haga en más de un día, es la que une desde Piódão a Castelo Novo, en Fundão, que tiene 82 kilómetros de largo. Esta Gran Ruta ha sido galardonada por la European Ramblers Association con el sello Leading Quality Trails – Best of Europe, que distingue a los mejores destinos de senderismo de Europa, teniendo en cuenta factores como la calidad de los senderos y su riqueza cultural y natural.

Las Pasarelas de Mondego, creadas en el municipio de Guarda, a unos 15 minutos de la ciudad, ofrecen una vista estupenda con un paisaje impresionante en un área que pertenece al Parque Natural Serra da Estrela. El recorrido tiene 12 kilómetros y se realiza en su mayor parte en compañía del río Mondego, en un camino que parte del pueblo de Videmonte, pasa por los pueblos vecinos de Trinta y Vila Soeiro hasta desembocar en la Presa de Caldeirão, con su habitual espejo de agua. Son cerca de siete kilómetros de pasarelas de madera, entre llanos y muchas escaleras, que serpentean por las laderas de la montaña y prometen asombrar a cualquiera que realice esta ruta, que también incluye cruzar puentes y reutilizar antiguos caminos.

El Santuario de Fátima, que recibe millones de visitantes al año, es el destino de esta ruta que tradicionalmente realizan los peregrinos que parten del Carmelo de Santa Teresa, en Coimbra, como muestra de fe. En total, son 111 kilómetros que atraviesan seis municipios de esta zona del Centro de Portugal, en un recorrido alternativo más seguro y cómodo respecto a los principales ejes viarios. La Ruta de Carmelo invita a caminar kilómetros en un acto de fe o de realización personal, inspirado en la vida y obra de sor Lúcia, una de las videntes de Fátima. Este es uno de los tantos Caminos a Fátima, que parten desde diferentes puntos hacia el santuario más grande del país. Sin embargo, esta ruta no está destinada sólo a los creyentes, ya que ofrece hermosos paisajes de fuerte riqueza natural, donde destacan cursos de agua y sierras, además de la fauna y flora, características de esta región.

Las playas de Figueira da Foz, Coimbra, “la ciudad de los estudiantes”, o el Embalse de Aguieira son solo algunos de los muchos puntos de interés que ofrece la Grande Ruta do Mondego a lo largo de sus 142 kilómetros. La ruta recorre los municipios de Figueira da Foz, Montemor-o-Velho, Coimbra, Penacova, Tábua y Oliveira do Hospital. La mayor parte del recorrido se realiza en compañía del río Mondego, el mayor río portugués, y es en este agradable marco donde es posible observar un gran número de lugares de interés paisajístico, natural, histórico y cultural. Los tonos de los arrozales del Baixo Mondego, la singularidad de los molinos de agua y la belleza de los embalses, terrazas y levadas no te dejarán indiferente. Te sugerimos realizar esta ruta dividida en varias etapas, comenzando en Oliveira do Hospital y finalizando en el bello marco de una de las hermosas playas de Figueira da Foz.

La magnífica Mata Nacional do Bussaco, catalogada como monumento nacional junto con el hermoso Palace Hotel do Bussaco, es el elemento central de esta ruta de 56 kilómetros que recorre los municipios de Mealhada, Penacova y Mortágua. Cada uno de los municipios de este territorio, favorecidos por un escenario increíble, tiene su tramo hacia la Mata, cuya biodiversidad es muy apreciada. La que parte de Mealhada es la más fácil de hacer con 12 kilómetros, mientras que las rutas a pie que parten de Mortágua y Penacova son, respectivamente, de 21 y 23 kilómetros. Si eres un amante del turismo de naturaleza, esta es una de las rutas de senderismo que no te puedes perder en el Centro de Portugal. La Mata (bosque) tiene más de 100 hectáreas de extensión y posee una notable variedad de flora y fauna. Aprovecha la oportunidad, y para reponer energías, nada mejor que sentarse en una mesa de uno de los muchos restaurantes de Mealhada para degustar el plato que es el “ex libris” de esta región, el Leitão à Moda da Bairrada, o sea, el cochinillo asado.

Con la hermosa Ría de Aveiro como elemento agregador, esta Gran Ruta tiene una longitud aproximada de 560 kilómetros, pero no te asustes que la puedes ir conociendo poco a poco. Sólo necesitas tiempo y voluntad. Hay tres rutas independientes para hacer, cada una con hermosos lugares para descubrir. La ruta azul tiene una longitud de 130 kilómetros, pasa por la Ría y sus principales cauces y tiene una duración estimada de seis días. La vía verde muestra la riqueza del interior de la comarca en la que se inserta, con 194 kilómetros para realizar en 10 días y es la ruta más exigente desde el punto de vista físico, ya que presenta una alta altimetría y un desnivel acumulado. La ruta más larga es la del dorado, con 233 kilómetros para recorrer en 11 días, que pasa en zonas costeras y atraviesa 11 municipios. Esta Gran Ruta presenta una vasta biodiversidad, tanto en fauna como en flora, que promete ser una experiencia única a quien acepte este reto, en el que el contacto con la naturaleza es una constante.

Es en la frontera entre las regiones Norte y Centro de Portugal donde se encuentran estas pasarelas, que no tardaron en convertirse en uno de los principales atractivos turísticos del municipio de Arouca, en el distrito de Aveiro. Ubicadas en una de las márgenes del río Paiva, las pasarelas de madera se extienden a lo largo de casi nueve kilómetros, ofreciendo magníficas vistas en una zona donde la naturaleza ha sido muy generosa. La cascada de Aguieiras, observable desde un mirador existente en las Pasarelas, es un ejemplo de cuánto hay para apreciar en esta ruta de trekking. Inauguradas en 2015, las Pasarelas se ubican en el territorio del Geoparque de Arouca, reconocido por la UNESCO como Patrimonio Geológico de la Humanidad, y ya han sido distinguidas con varios premios de los World Travel Awards en las categorías de “Mejor Atracción de Turismo de Aventura en el Mundo”, “Mejor Proyecto de Desarrollo Turístico de Europa” y “Mejor Atracción de Turismo Aventura de Europa”. Contrariamente a las otras sugerencias que dejamos aquí, par la entrada a las Pasarelas de Paiva hay que pagar, excepto para niños hasta 10 años.