Siete alojamientos que combinan relajación y Fe

Este alojamiento está escondido en un bosque místico, que en sí mismo es un excelente comienzo. Inspirado en la arquitectura tradicional de los siglos XIX y XX, tiene su mirada puesta en el futuro y en noches despejadas es posible escuchar los cantos del Santuario de Fátima, que se encuentra a solamente cinco minutos.  Además de todo el ambiente zen y la naturaleza que lo rodea, el alojamiento ofrece varios programas y actividades, desde clases de Yoga, Meditación, masajes en cueva, cerámica, paseos a caballo, en barco o en moto de agua, avistamiento de delfines… y mucho más. ¡Decide lo que quieres hacer, mientras te das un chapuzón en la piscina de agua natural, rica en magnesio, que te recordará la piscina de piedra de tu infancia, en casa de tus abuelos, cuando la palabra estrés (todavía) no formaba parte de tu vocabulario!

La Congregación del Verbo Divino, fundada en 1875 en Holanda, se instaló en Portugal en los años 40 y dio origen a este alojamiento. Su objetivo inicial era preparar y enviar sacerdotes a los territorios de misión, pero por su cercanía al Santuario de Fátima, inmediatamente fue procurado por los peregrinos para dormir. A fines de la década de 1980, asumió solo la vocación de alojamiento. Además de comodidad y bienestar, encontrarás paz y tranquilidad para momentos de meditación y reflexión en espacios dedicados a la religión y a la introspección, como la Capilla de la Madre de Dios y la Capilla de S. José Freinademetz, que tiene Eucaristía celebraciones y permite la oración personal. En el exterior, la Vía Sacra y los jardines completan el ambiente de espiritualidad y la visita al Santuario cerrará con llave de oro tu viaje al lugar de culto mariano más importante de nuestro país.

Esta finca se encuentra a unos 15 kilómetros del Santuario de Sameiro y, incluso antes de llegar allí, entre caminos estrechos y empinados, te olvidarás del tiempo que rige el calendario del común de los mortales. Pero la peregrinación valdrá la pena, cuando los propietarios te reciban con la calidez típica de Minho, muchas historias y un gran balcón a la sombra de una buganvilla, con vistas a un paisaje que hablará directamente a tu espíritu. Aquí, la Fe está en la Naturaleza, que te proporcionará momentos únicos de relajación: prepárate para dormirte con el ulular de los búhos y para despertarte con el balido de las ovejas. Puedes alojarte en una de las habitaciones de la casa principal o en una de las masías. Si quieres privacidad absoluta, alójate en la Casa de São Vicente (parte de la misma finca, pero con diferente administración): tiene cinco dormitorios, una piscina privada, jardines increíbles y una parra que será el lugar perfecto para un almuerzo familiar o con amigos, que te hará sentir como el protagonista de una película italiana de los años 60.

¿No te imaginas relajando profundamente sin una copa de vino en la mano? Bienvenido a Torre de Gomariz Wine & Spa Hotel. A tan sólo 25 kilómetros del Santuario de Sameiro, este hotel boutique de 5 estrellas está rodeado de un paisaje dominado por viñedos y frondosos bosques, con el silencio como banda sonora. Hay varios servicios que harán de tu estancia una experiencia inolvidable: en el Wine Bar puedes disfrutar de un almuerzo informal o realizar una cata de vinos, en el Restaurante Gomariz puedes disfrutar de la cocina portuguesa contemporánea, en el Camellia Spa - con piscina cubierta , jacuzzi y una amplia variedad de masajes y tratamientos, podrás renovar tu energía y tener momentos de relajación. Si te gusta más acción, un paseo en bicicleta o un partido de tenis están disponibles.

En el siglo pasado, el famoso escritor portugués Miguel Torga describió muy concisamente a Gerês: “Hay lugares en el mundo que son como ciertas existencias humanas: todo se combina para que nada falte en su grandeza y perfección”. Y es en el entorno de esta perfección natural, entre rocas salvajes y frondosos robles seculares, donde nace la arquitectura moderna de OAK Nature. A solamente seis kilómetros del Santuario de São Bento da Porta Aberta, el espacio invita al bienestar y la relajación de diferentes maneras: con amplias habitaciones con espacios acristalados para la Naturaleza, con su SPA (jacuzzi, sauna y baño turco) y con la apetecible piscina exterior climatizada, con los impresionantes paisajes de Gerês como telón de fondo. En la inmensidad del bosque circundante, explora las líneas de agua y los pequeños puentes, el lago lleno de truchas y la huerta. Piérdete, para volver a encontrarte.

El día comienza con una clase de Yoga y continúa con una visita al Parque Nacional de Peneda-Gerês, a lo largo de increíbles senderos que conducen a cascadas mágicas. ¿Te gusta la idea? Esta es solo una de las formas de empezar el día en Selina Gerês, un alojamiento diseñado para adaptarse a (casi) todo tipo de viajero. ¿Prefieres una habitación privada, un dormitorio compartido, un lujoso loft o una tienda de campaña para dormir y admirar las estrellas? Solo tienes de elegir. Además de las actividades más habituales - como paseos a caballo o piragüismo -, el alojamiento cuenta con un ecléctico menú que incluye Yoga, Shiatsu, Meditación o Reiki, además de la lectura del Mapa Astral o el “Círculo de la Luna”, por citar solo algunas. Si no necesitas tanto para momentos de relajación profunda, dirígete a la piscina o únete a otros viajeros en la terraza con una cerveza fresquita o una copa de vino, disfruta de la noche de cine o baila en un animado set de electro, mientras contemplas el paisaje y haces de la naturaleza y la convivencia tu religión. El Santuario de São Bento da Porta Aberta está a unos siete kilómetros de distancia.

Imagínate en un salón digno de la realeza, sentado en una mesa exquisita, frente a un Cabrito Serrano con Arroz al Horno y Patatas Asadas, acompañado de un hermoso vino del Duero. Termina la comida con un dulce conventual, de esos de abuelas. ¿Suena como una buena propuesta para entrar en modo Zen? Esta es solamente una de las opciones (gastronómicas) del Hotel Rural Casa dos Viscondes da Várzea. Situado en el corazón del Duero, cerca de Lamego, al cruzar las puertas blasonadas de este lugar de más de 180 hectáreas, divididas entre viñedos, olivos y árboles frutales, inmediatamente sentimos la magia de un lugar que promete momentos inolvidables. La cocina local es únicamente una de ellas. Los espacios interiores de decoración principesca, los encantadores jardines, la piscina o la Capilla de arquitectura gótica-manuelina, son otros elementos que te transportarán a la época de reyes y reinas, príncipes y princesas y a tan solo 10 kilómetros del Santuario de Nossa Senhora dos Remédios y los 686 escalones de su imponente escalera.