Romance en Portugal: 10 consejos para un fin de semana

Cascadas de ensueño, bosques encantados y paisajes verdes en cada rincón, el Parque Nacional Peneda-Gerês es el epítome del romance en el norte de Portugal. Podrás elegir un alojamiento en pleno contacto con la Naturaleza (hay muchos con jacuzzi en la habitación, por ejemplo), o una estancia en relajantes spas, con programas de belleza y bienestar. Es el escenario ideal para una escapada en pareja, para recuperar energías y darle vida a la relación.

Con el encantador Castillo de Guimarães y el Paço dos Duques de Bragança, que parecen sacados de un cuento de hadas, la ciudad de Guimarães sería, sólo por eso, un excelente destino para un fin de semana romántico en pareja. Pero la ciudad tiene mucho más que ofrecer, como un paseo por el centro histórico, con especial atención al Largo da Oliveira, una visita al Santuario de Penha y un paseo en su teleférico.

Con el río Duero como telón de fondo, no faltan rincones románticos en la preciosa ciudad de Oporto. Hay mucho que ofrecer y podrás descubrirlo mientras exploras la ciudad, pero te dejamos algunos puntos que no te puedes perder: cena en Cais da Ribeira, visita nocturna a la Torre dos Clérigos, paseo en embarcaciones típicas Rabelo por el río Duero, visita a las bodegas de Gaia con degustación de vinos y paseo por el verde Parque de la Ciudad, finalizando con la contemplación del atardecer junto al mar, justo frente al Parque.

Integrada en la magnífica Región Demarcada del Duero, la encantadora región de Pinhão, integrada en el municipio de Alijó, alberga muchas de las fincas productoras del famoso Vino de Oporto. En el corazón de la región vinícola del Duero, es por tanto una gran opción para un fin de semana romántico en Portugal. A disposición hay alojamientos rurales en fincas con catas de vino, paseos en barco por el río, sin olvidar la visita a la Estación de Tren, con los famosos paneles de azulejos.

Tranquilidad y diversidad son las palabras que mejor describen el Parque Natural de la Serra da Estrela. En invierno ver las montañas cubiertas de nieve y practicar deportes de invierno son las actividades más populares, pero durante el verano la montaña también tiene sus encantos, aprovecha para descubrir las magníficas y refrescantes playas fluviales de la región. Durante la primavera y el otoño, la Serra se llena de coloridas flores y colores otoñales, que le confieren un misticismo romántico único. No faltan alojamientos con jacuzzi, chimenea en la habitación y piscina cubierta para terminar el día en grande.

No podríamos hablar de romance en Portugal sin mencionar Coimbra, también conocida como la “Ciudad de los Amores”, escenario de una de las más bellas y trágicas historias de amor, entre D. Pedro de Portugal y D. Inês. de Castro. Además de visitar la magnífica Quinta das Lágrimas, asociada a esta historia, visita el centro histórico, comenzando por la Sé, y continúa hasta el Parque Dr. Manuel Braga, con vistas privilegiadas (y románticas) sobre el río Mondego. Por la noche, visita restaurantes tradicionales, donde podrás escuchar fado y, si tienes suerte, serenatas típicas.

Óbidos es un pueblo medieval y tradicional, perfectamente conservado, que ofrece al visitante un viaje en el tiempo a la época de caballeros, reyes y reinas. Podrás alojarte en su castillo, donde hay una posada, un auténtico sueño de las mil y una noches para los enamorados. Déjate perder por sus callejuelas de casas encaladas con flores en balcones y ventanas, repletas de tiendecitas y restaurantes tradicionales. En consonancia con el ambiente medieval, existen carruajes que realizan recorridos turísticos.

Clasificado por la UNESCO como Paisaje Cultural y Patrimonio de la Humanidad, Sintra es un pueblo mágico, donde el pasado se mezcla con el presente y el reino de la fantasía se mezcla con la realidad, en una combinación romántica como ninguna otra. De las diversas granjas y palacios aquí, los más notables son el encantador Palácio Nacional da Pena, el Palácio Nacional de Sintra, el Palácio de Seteais, el Convento dos Capuchos y la Quinta da Regaleira. Termina con una visita al pueblo para degustar los famosos bizcochos llamados "travesseiros".

El Gran Lago de Alqueva es uno de los lagos artificiales más grandes de Europa, construido sobre el río Guadiana. En una región de gran belleza, aquí podrás practicar deportes acuáticos, alquilar una casa flotante y literalmente dormir en el Gran Lago. Para disfrutar del conocido cielo estrellado de Alqueva, no dejes de visitar el Observatorio Oficial Dark Sky, en Reguengos de Monsaraz, donde podrás tener una experiencia visual única de los planetas y estrellas. ¿Hay algo más romántico que ver las estrellas de la mano de tu media naranja?

Nuestras sugerencias de destinos románticos en Portugal terminamos en las Azores, más precisamente en la Isla de São Miguel. Dotada de la madre naturaleza con los paisajes más verdes y mágicos que jamás has visto, la isla tiene rincones realmente sorprendentes y hermosos. Además de las lagunas (Lagoa Verde, Lagoa das Sete Cidades, Lagoa Rasa, Lagoa do Fogo, entre otras), podrás bañarte en las cálidas aguas de Poça da Dona Beija, Caldeira Velha y Parque Terra Nostra. En este último, disfruta de un romántico paseo por sus agradables jardines.