Road trip gastronómica: dónde comer en el Alentejo

En pleno Paço Ducal, uno de los lugares de visita obligatoria en Vila Viçosa, se encuentra la Taberna dos Conjurados. Mal si entra en el espacio, sus amplias arcadas parecen transportarnos a otros tiempos, siendo que la grandiosidad se mantiene en el momento en que la comida llega a la mesa. Acogedor por naturaleza y regional por inspiración, la Taverna dos Conjurados hace las delicias de los visitantes. También el entusiasmo e historias del propietario son ya una tarjeta de visita para quien por allí pasa.

Entrar en el restaurante A Maria, en el Alandroal, es como sumergirse en un típico patio alentejano, con las casas blancas y los tradicionales azules y amarillos. Hay ropa extendida, canteros de agua, jarrones con flores y hasta jaulas. Todo para envolverlo con el auténtico espíritu alentejano, completado de forma magistral con la gastronomía típica de la región. Desde la sopa de cazón a la perdiz estofada, pasando por el cordero a la tía María, todos los platos respiran la inspiración e identidad culinaria del Alentejo.

Espacio acogedor, se recomienda la reserva anticipada porque los pocos lugares llenan rápidamente. La calidad de Tasquinha do Oliveira atrae locales y visitantes, que no se resisten a esta invitación a un verdadero manjar de los sentidos. El vino e ingredientes regionales se mezclan perfectamente, de los platos de pescado a los de carne, sin olvidar el bien confeccionado marisco. La decoración, también de inspiración alentejana, transforma esta experiencia gastronómica en un viaje por la región sin salir del lugar.

Ubicado en el centro de la encantadora villa de Mourão, la Adega Velha es una referencia en la gastronomía alentejana. Como una bodega exige, el vino es uno de sus talismanes, y está presente en potes de barro a lo largo del espacio, acompañando a la perfección las especialidades culinarias. Estas van del cocido de grano con carnes a la sopa de cazón, siendo que, si tiene suerte, podrá ver su comida abrillantada por una actuación de Cante Alentejano.

La tradición y la modernidad se encuentran en Cuba, en la Taberna do Arrufa, donde los sabores de la región se reinventan a la mesa. El pulpo es una de las estrellas habituales, así como las migas y las mejillas de cerdo. Además de encantar locales y turistas con la gastronomía típica, el espacio organiza también eventos de música variada, como Fado o Cante Alentejano. No deje de estar atento a la agenda del local y, si el tiempo así lo permite, aproveche para comer en la terraza.

Aún en Cuba, somos recibidos en la Adega da Casa de Monte Pedral por una estatua del navegante Cristóbal Colón que, rezan algunas teorías, aquí habrá nacido. Una certeza es la calidad de los ingredientes y vinos del Alentejo, que marcan la identidad de esta Casa. El viaje por la tradición alentejana continúa dentro de puertas, en un espacio amplio adornado por varios potes y con un gran árbol en el centro. En la mesa no pueden faltar el muy popular empapado y el bacalao, así como las açordas y las migas.

Todo el restaurante respira historia. El nombre proviene de la revolución de los claveles, que devolvió la libertad a Portugal después de años de dictadura y el espacio está decorado con elementos típicos de la vida Alentejo. Ya una referencia en Beja, la Adega Típica vehicula la buena tradición alentejana en la comida y la bebida, recuperando muchos de los platos que forman parte de la identidad de la región. El cerdo negro es una de las estrellas de la compañía, siendo que los platos de carne son las principales referencias del restaurante.

Su nombre puede tener origen en la cerveza, que defienden ser la "mejor del mundo", pero la Cervejaría Lebrinha también es un lugar ineludible cuando el asunto es comida. Se trata de un espacio simple, pero muy acogedor, donde no faltan los clientes habituales y otros atraídos por la curiosidad. El menú tiene açorda alentejana, migas y muchas otras delicias de la región. Para quien busca solo aperitivos o comidas más ligeras, la oferta es variada, teniendo como protagonistas las mollejas y las tiritas de jibia.

Para muchos una parada obligada en el viaje hacia el Algarve, particularmente para excursiones que por allí pasan, el restaurante Cruzeiro es ya una referencia de la gastronomía alentejana. Sin embargo, también es fácil encontrar allí residentes. Entre las especialidades, puede encontrar manitas de cerdo y las migas con bacalao y con carne, pero la oferta de carne y pescado es bastante variada. Como se trata de un espacio amplio, invita también a la realización de encuentros de grupos y otros eventos.

La encantadora Vila Nova de Milfontes no es solo playa, y la Tasca do Celso es una de las pruebas de ello. Sin embargo, no se trata de una tasca típica y el propietario no se llama Celso, siendo, en cambio, un homenaje al padre, una figura conocida en la población. También la comida alentejana se celebra en este espacio, de los aperitivos a los tradicionales platos de cerdo negro y migas, pasando por el vino de la región. La decoración, inspirada en el Alentejo, tiene algunos detalles inesperados e incluso divertidos.