Los Mejores Lugares para la Observación de Aves en Portugal

Perteneciente al único Parque Nacional del país, la Serra do Gerês es un tesoro que merece ser explorado. En un extenso territorio encontrará hábitats de increíble diversidad, como la Portela de Leonte, donde se pueden observar aves como el carbonero garrapinos o el reyezuelo listado, y la Mata de Albergaria, que alberga aves rapaces como el azor o el pequeño pájaro insectívoro mosquitero ibérico. Pasando a la región de Trás-os-Montes, uno de los mejores lugares para la observación de aves es el Planalto da Mourela, donde encontrará especies raras en Portugal, como el alcaudón dorsirrojo, la alondra y el roquero rojo. Aproveche y de un paso hasta Pitões das Júnias, donde destacan especies como el petirrojo europeo y la curruca capirotada.

Si la pregunta es dónde observar aves, el estuario del Duero, en particular el arenal de Cabedelo, es uno de los mejores lugares de la región para observar aves migratorias y playeras. Desde la torre de observación en la margen izquierda del río Duero, en Gaia, tendrás una vista despejada de un paisaje único y de especies como el andarríos chico, la gaviota patiamarilla o la gaviota reidora. Algunas de las aves migratorias que hacen parada en la ría son la garza real o el cormorán grande. Aproveche y va al otro lado del río. En Oporto, pase por el Parque de la Ciudad, donde podrá ver una gran variedad de aves acuáticas, como el ánade real, la focha común o la polla de agua, y grandes aves terrestres, como la garcilla bueyera o la cotorra de Kramer.

La Ría de Aveiro es uno de los lugares privilegiados para la observación de aves acuáticas. Los complejos salinos, como Marinha da Troncalhada, atraen una extraordinaria variedad de especies, como la garceta nívea o el cormorán grande. Más al norte, en Murtosa, es posible caminar por la orilla de la península, que ofrece unas vistas impresionantes sobre la ría y donde es posible observar otras especies, como el flamenco común. La zona del Forte da Barra también merece una visita. Allí se puede recorrer a pie toda la longitud del embarcadero, en compañía de aves como el chorlitejo patinegro, el negrón común o el raro correlimos oscuro.

Serra da Estrela, en la región central, es rica en diversos hábitats y alberga especies que rara vez se observan en otros rincones de Portugal. Cerca de la Torre destacan el bisbita campestre, la collalba gris o, en invierno, el acentor alpino y el escribano nival. En la desembocadura del río Zêzere, se encuentra una extraordinaria formación geológica denominada Cântaro Magro, donde anidan aves como el mirlo capiblanco, el colirrojo tizón y el avión roquero. Aproveche el mirador que se ubica junto a la carretera que viene de la Torre para deslumbrarse con todo el entorno paisajístico de la sierra, un lugar de ensueño también para la observación de aves e ideal para fotografiar momentos inolvidables.

La península de Peniche, particularmente hermosa, también es adecuada para los observadores de aves. Además de la extraordinaria belleza de los acantilados, los miradores que encontrará a lo largo del camino son los lugares más populares para la observación de aves marinas, como el vuelvepiedras rojizo o el cormorán moñudo. El Ilhéu da Papoa es una parada obligatoria, preferiblemente junto al hito geodésico, donde se puede observar regularmente el halcón peregrino. Junto al Muelle Este, que se puede recorrer a pie, es posible observar especies como la gaviota patiamarilla, el playerito blanco o, si la suerte sonríe, el correlimos oscuro.

La Reserva Natural del Estuario del Tajo es considerada uno de los humedales más importantes del país, debido a su impresionante biodiversidad en cuanto a especies de fauna y flora, y es uno de los lugares más cotizados por los observadores de aves en Portugal. Entre las muchas especies de aves que puede encontrar, destacamos el tarro blanco, la garza imperial y el águila pescadora. También puede encontrar algunas aves raras, como el ánsar campestre, el tarro canelo y el guion de codornices, mientras pasea por el Parque Linear. A tiempo, siga nuestra sugerencia y visite la Serra da Arrábida. Además de paisajes de inigualable belleza, aquí encontrará especies únicas en el territorio nacional, como el reyezuelo listado, el ruiseñor común, el rabilargo asiático o el vencejo pálido.

Continuamos en las regiones húmedas, esta vez en una de las más extensas del país y que cubre un vasto territorio, desde la ciudad de Setúbal y la zona de Palmela, hasta Alcácer-do-Sal y Grândola. Sabiendo qué visitar, puede ver más de 80 especies diferentes en un día. En la orilla norte del río Sado, las especies más comunes son la cigüeñuela común, la avoceta común, el chorlitejo grande o el zampullín cuellinegro. En la margen sur, más concretamente en las penínsulas de Tróia y de la Carrasqueira, se observan con facilidad especies como el pechiazul, el flamenco común, la cigüeña blanca o el menos común pájaro moscón europeo. En verano, aproveche para darse un chapuzón en las impresionantes playas que caracterizan la región.

Terminamos en el Algarve, entre Portimão y Lagos. Un destino de vacaciones por excelencia de los portugueses y no solo, el sur del país es mucho más que playas paradisíacas. Para muchos observadores, la Ría de Alvor es una de las zonas más ricas y diversas de avifauna del país, a pesar de su superficie relativamente pequeña, lo que hace que la experiencia sea aún más enriquecedora. Aquí encontrará aves típicas de marismas y estuarios, aves marinas y aves terrestres. Entre algunas de las especies más comunes que eligen la zona para anidar, tenemos el serín verdecillo, el verderón europeo, la abubilla europea o el triguero. Desde el pueblo de Alvor, viaje y explore el sistema de dunas donde, además de encontrar las condiciones más favorables para la observación de aves, también puede pasear o andar en bicicleta por las pasarelas.