Por la creencia, por fascinación o simple curiosidad, Fátima acoge anualmente a millones de visitantes. El 13 de mayo, día en que Nuestra Señora apareció a los tres Pastorcitos en 1917, es uno de los momentos culminantes de las celebraciones que llevan miles de peregrinos al Santuario, muchas veces en largos viajes a pie. Sin embargo, no sólo de religión vive esta zona y hay mucho más para disfrutar en la ciudad o cerca. Embárquese en este viaje con All About Portugal y conozca 12 lugares que no debe perderse cuando visite Fátima.

Museo de cera

Museo de cera

Promete hacer las delicias de los niños y los niños. A lo largo de 32 escenas y 120 figuras de cera, el Museo evoca los principales episodios de las apariciones de Fátima, así como de los acontecimientos históricos más importantes que le subyacen. El Milagro de Fátima surge retratado por figuras 3D, minuciosamente creadas con el cuidado de procurar mantener las imágenes fieles a la realidad y envueltas en un ambiente propio, casi vivo, para proporcionar a los visitantes una experiencia única.

Vía Crucis, el Camino de los Pastorcitos

Vía Crucis, el Camino de los Pastorcitos

Es uno de los recorridos más populares de Fátima, que lleva a los peregrinos a lo largo de 14 capillas que representan las diferentes estaciones de la Pasión de Cristo. Uno de los puntos más emblemáticos de aquel que también es conocido como "Camino de los Pastorcitos" es la Loca do Anjo, el lugar en que habrá ocurrido apariciones del Ángel a los videntes, y donde existe una escultura alusiva al tema. El Vía Crucis comienza en la Rotonda Sur y termina en el Calvario Húngaro, cuya capilla está dedicada a San Esteban.

Casas de los Pastorcitos

Casas de los Pastorcitos

Era en la pequeña aldea de Aljustrel, a unos dos kilómetros del Santuario, que vivían los tres pequeños pastores en el momento de las apariciones. Allí están recreados los hábitos y costumbres de los hermanos Francisco y Jacinta, así como de su prima Lúcia. Las dos casas, pautadas por la sencillez y la modestia, están separadas por pocos metros y reciben anualmente miles de turistas. La entrada es gratuita y puede optar por hacer el recorrido a pie o a través del agradable convoy turístico.

Monumento Natural de las Huellas de los Dinosaurios

Monumento Natural de las Huellas de los Dinosaurios

Descubiertas en 1994, las huellas de algunos de los mayores seres que habitaron el planeta Tierra representan un importante registro fósil del período Jurásico Medio, con cerca de 175 millones de años. La gran cantidad de vegetación que ha permitido la proliferación de dinosaurios herbívoros, potentes y cuadrúpedos como los Saurópodos. Es posible observar pisadas profundas y nítidas huellas de dedos en una extensa placa de piedra caliza. El mayor carril tiene 147 metros de largo.

Parque Natural de las Sierras de Aire y Candeeiros

Parque Natural de las Sierras de Aire y Candeeiros

Esta Área Protegida posee un vasto patrimonio natural y cultural, con varios puntos de gran interés, en un ambiente bucólico de rara belleza. La Depresión de los Álvados y el Carril de la Fórnea, estructura geológica única con un formato de anfiteatro de 500 metros de diámetro, son de los más bellos paisajes del macizo. Los Ojos de Agua de Alviela, una de las nacientes más importantes del país, es otro punto ineludible. También el Centro de Ciencia Viva y las Marinas de Sal de Rio Maior merecen una visita.

Cuevas de Mira de Aire

Cuevas de Mira de Aire

Son las mayores cuevas turísticas en Portugal y fueron elegidos en 2010 como una de las Siete Maravillas de Portugal. Es difícil quedar indiferente a su belleza, sea por la dimensión de las galerías majestuosas, por las bellas estalactitas o por las deslumbrantes columnas. Las aguas cristalinas de los lagos y el juego de luces complementan el cuadro de esta obra maestra de la Naturaleza, que acoge a cerca de seis millones de visitantes al año. Sólo 600 metros de sus 11 kilómetros son visitables.

Cuevas de Alvados

Cuevas de Alvados

Este deslumbrante mundo natural fue descubierto en el municipio de Porto de Mós, en 1964, por obreros de las canteras de la región. Consideradas por muchos de las cuevas más distintivas de la Península Ibérica, tienen una longitud visitable de 350 metros y abrieron al público en 1973. Las Cuevas de Alvados se destacan por las formaciones oolíticas, típicas del subsuelo de la región, en que las estalagmitas y estalactitas aparecen conectadas con pequeños lagos naturales.

Cuevas de la Moeda

Cuevas de la Moeda

Deben el nombre al hecho de que se han encontrado monedas antiguas en uno de los algares que da entrada a las cuevas. Se descubrieron en 1971 por cazadores que, al perseguir a un zorro, encontraron una cueva que se distingue por sus galerías repletas de formaciones calcáreas. Tienen una extensión visitable de 350 metros y sus varias galerías naturales fueron bautizadas según las imágenes que sugieren. Algunas de las más peculiares son la Laguna de la Felicidad, la Sala del Pesebre y la Fuente de las Lágrimas.

Playa fluvial de Agroal

Playa fluvial de Agroal

Es muy apreciada por sus aguas frías, que tienen la fama de ser termales y tienen propiedades terapéuticas, aconsejadas para enfermedades gastrointestinales o de piel. Además de la playa fluvial y de una piscina natural, la zona dispone de un pequeño parque de meriendas, solárium y un anfiteatro al aire libre. También puede disfrutar de un Parque Naturaleza, donde es posible conocer la geomorfología y la hidrología, así como la flora y la fauna de la región.

Castillo de Ourém

Castillo de Ourém

Es Monumento Nacional y un punto emblemático en la población de burgo en la Edad Media. Presenta tres torres cuadrangulares, además de un recinto triangular, que tiene en su interior una cisterna subterránea. Revela ocupación humana desde el Calcolítico y acoge el Terreiro de Santiago, uno de los más bellos miradores del municipio. No dejes de aprovechar para dar un paseo por la villa medieval, enriquecida por las calles con trazos de otros tiempos, que rasgan el caserío blanco.

Castillo de Leiria

Castillo de Leiria

Conquistado a los moros en 1135 por D. Afonso Henriques, primer rey de Portugal, el Castillo se encuentra en una zona con vistas a la ciudad y aún conserva dentro de sus muros las marcas que identifican las diferentes fases de la ocupación, desde el Palacio Real hasta la fortaleza militar. En Alcáçova, una de las salas más bonitas, podrá disfrutar de una panorámica envidiable sobre la ciudad. D. Dinis y la Reina Santa Isabel, a quien se atribuye la leyenda del Milagro de las Rosas, habrán sido los reyes que más tiempo pasaron en Leiria.

Monasterio de la Batalla

Monasterio de la Batalla

Su valor arquitectónico y su significado histórico llevaron a la UNESCO a clasificarlo como Patrimonio Mundial de la Humanidad en 1983. Es uno de los más fascinantes monumentos góticos de la Península Ibérica pero, como su construcción se prolongó por dos siglos, también fue ampliamente influenciado por el Manuelino, además de tener apuntes renacentistas. No pierda los vitrales de los siglos XV y XVI, ejecutados por los mayores especialistas de la época, y el espectáculo de iluminación nocturna.