Las mejores playas para niños en el Algarve

Situada en un pueblo de pescadores, la playa de Odeceixe tiene fácil acceso y está dividida por el Arroyo de Ceixe, que separa el Alentejo del Algarve. Puede, entonces, optar por bañarse en el río o en el mar, en un paisaje circundante de rara belleza y tranquilidad. Cuando la marea está baja se forman pequeños lagos que sin duda harán las delicias de los niños.

La playa de Salema, en Vila do Bispo, destaca por sus aguas cristalinas y arena fina, y por su proximidad al pueblo de pescadores, por lo que aún es posible encontrar pescadores tradicionales y apreciar su artesanía. Una nota curiosa sobre esta playa es que aquí se pueden encontrar los restos del buque de guerra francés Ocean, ¡una historia que encantará a todos los pequeños piratas!

No se puede hablar de las mejores playas para niños sin mencionar la magnífica playa de Burgau, también en Vila do Bispo. Con sus casas azules y blancas, Burgau es conocido como el Santorini portugués, un pintoresco pueblo de pescadores que se dice que es el secreto mejor guardado del Algarve. Rodeada de acantilados, la playa es estrecha pero larga, creando piscinas naturales durante la marea baja, ideales para que los niños jueguen.

A pesar de las escaleras de acceso, la playa de Dona Ana, en Lagos, es una de las mejores opciones del Algarve para unas vacaciones con niños. Con arena fina entre coloridos acantilados e interesantes formaciones rocosas, ya considerada una de las playas más hermosas del mundo. Las tranquilas aguas y la buena infraestructura completan el panorama ideal, lo que justifica estar en el tope de esta lista.

Considerada una de las playas más bellas del mundo, y ya premiada como Praia Dourada (Playa Dorada) por el Ministerio de Medio Ambiente, la playa de Marinha, en Lagoa, es una visita obligada y perfecta para llevar a sus hijos. Además de la calidad de sus aguas, destaca el panorama circundante, con la arena rodeada de magníficos acantilados dorados e impresionantes arcos excavados por el mar.

La playa de Armação de Pêra, en Silves, se encuentra en un bonito pueblo de pescadores y se extiende sobre una franja de arena de tres kilómetros de ancho, con una pasarela peatonal justo al lado, ideal para pasear. La arena está bordeada por los arroyos Alcantarilha y Espiche y tiene una buena infraestructura de apoyo, lo que la convierte en una de las mejores opciones de playa para niños en el Algarve.

Situada en el pintoresco pueblo del mismo nombre, Olhos de Água, esta playa de Albufeira tiene mucho que ofrecer y aún se pueden ver típicas embarcaciones de pescadores. El nombre Olhos de Água deriva de los manantiales de agua dulce que brotan en la arena, visibles durante la marea baja. Asegúrese de explorar con los niños los acantilados y cuevas de piedra caliza llenos de diversa vida marina.

Integrada en el Parque Natural de Ria Formosa, la playa de Ancão, en Almancil (Loulé), tiene un extenso arenal rodeado de un bosque de pinos y alcornocales, que permite la privacidad. También está rodeada por un vasto sistema de dunas, donde es posible vislumbrar varias especies de animales. Tiene buena infraestructura y excelentes restaurantes.

La playa de Barril, en Tavira, es un éxito instantáneo entre los niños, ya que es accesible en un pequeño tren que atraviesa el Parque Natural de Ría Formosa. Hay quienes optan por aventurarse a pie, tenga en cuenta que es un viaje largo. Es una playa tranquila, de aguas cristalinas y arena fina, el paraíso ideal para unas inolvidables vacaciones en familia.

Nuestra última sugerencia para explorar el Algarve con niños es la playa Verde, en Castro Marim. Rodeada por un bosque de pinos (de ahí el nombre verde), es una playa tranquila, con aguas cálidas y transparentes y una buena infraestructura de apoyo. Una de las mejores opciones de playa para niños en el corazón del este del Algarve.