Edificio de origen remoto está situado en un estrecho que penetra en el mar. En su construcción, esta ermita incorpora piedras de anteriores construcciones romano-medievales situadas en sus cercanías. En su interior se conserva una valiosa imagen de la Virgen con el Niño del siglo XVI. Esta ermita estuvo rodeada por una fortaleza de defensa costera que fue destruida por el terremoto de 1755.

Formó, junto con el Fuerte de Santa Catarina, la defensa del estuario del río Arade. Originalmente, consistía en una torre de vigilancia, pero fue ampliada en los siglos XVII y XVIII. Por iniciativa del poeta Coelho Carvalho, a principios del siglo XX, la residencia sufrió importantes obras de adecuación, que le dieron el aspecto romántico que presenta hoy.

A nuestra llegada nos espera un mirador con una capilla, de donde deriva el nombre de la playa. Situada entre acantilados, ofrece excelentes condiciones para disfrutar de agradables jornadas bajo el sol. La playa tiene zona de concesión, ya que en sus alrededores hay varios conjuntos turísticos. Desde aquí parten barcos para visitar las cuevas de los acantilados que abundan.

Sobre una playa estrecha y llana, tras un fuerte descenso formado por numerosos escalones, se encuentra esta playa, muy utilizada por turistas de los conjuntos hoteleros que rodean la zona. El mar invita a realizar algunas actividades náuticas o nadar. El agua es de buena calidad.

Este es el principal centro balneario de Lagoa. Hoy en día sigue siendo una playa de pescadores, cuyo acceso ha sido remodelado. Así, caminando por las calles y callejones de acceso restringido para vehículos, en dirección al mar, aparece la playa, cercana a la zona comercial. La playa no es extensa, es estrecha y relativamente pequeña y tiene una zona de concesión. Para conocer mejor esta parte de la costa, sugerimos alquilar un barco que llevará a los bañistas a ver las cuevas.

Enclavada entre acantilados y, por tanto, resguardada, es una playa muy bonita, de fácil acceso y con agua de buena calidad, aunque a veces picada. El bar se extiende hacia la playa y suele tener música ambiental muy agradable.

Considerado uno de los mejores parques acuáticos de Europa, se encuentra a sólo unos minutos de Portimão y ofrece todo tipo de actividades divertidas y recreativas en el agua. Si quieres pasar un día lleno de emoción y sensaciones vertiginosas, ¡este es el lugar ideal! La principal atracción es el Black Hole.

Este fue el primer campo de golf de Madeira, construido en 1937 y luego rediseñado en 1991 por el famoso arquitecto de golf Robert Trent Jones. Con vistas a la Bahía de Machico, tiene tres campos, cada uno con dos pares 5, dos pares 3 y cinco pares 4. Los campos "Machico" y "Desertas" son los que se utilizan habitualmente durante el Madeira Open, mientras que el campo "Serras", suavemente llano, mantiene el nivel de juego. Santo da Serra acoge anualmente el Madeira Open, un torneo integrado en el PGA European Tour.

Playa dividida por una zona de guijarro basáltico y otra de arena amarilla, con buenas condiciones para el baño y el sol. Dispone de piscina, zonas para fútbol y vóley-playa, hidropedales y motos de agua, alquiler de tumbonas y sombrillas.

Playa de arena fina, situada cerca de Ponta de São Lourenço, que se caracteriza por tener altos acantilados, lo que la convierte en una playa de difícil acceso.