Aldeia da Luz
Aldeia da Luz, como se la conoce hoy, es el resultado del avance del tiempo. Con la construcción del embalse de Alqueva quedó sumergida la antigua Luz, de origen paleolítico y neolítico, al igual que el castillo de Lousa, de origen romano, y algunos cruces de calzadas romanas que atravesaban el Guadiana. Contra la voluntad de la población, se construyó desde cero un pueblo, a unos dos kilómetros del antiguo, inaugurado en 2002. A pesar del intento de mantener las características y bienes patrimoniales anteriores, es imposible reproducir perfectamente lo que se llevaron las aguas. Para evitar que el pasado de este pueblo quede igualmente sumergido, se creó en 2003 el Museo de la Luz, gracias al deseo de la población de preservar su identidad.