El principal interés de este se encuentra Palacio en los sillares de azulejos del siglo XVIII de diversos patrones que adornan los pasillos del piano nobile, algunos firmados por Raimundo do Couto, de discípulo Oliveira Bernardes.
Antiguo colegio de los jesuitas, erigidos en el sitio donde estaban las residencias de la familia de Távora y desde 1776 la residencia de los capitanes generales de las Azores. Dentro, hay valiosas obras de arte y muebles, incluyendo la mejor colección de los azulejos del siglo XVII holandés que existen fuera de Holanda.
Palacio del siglo XVII, construido por Miguel País Amaral. Presenta una fachada recortada por anchas pilastras y dos hileras de ventanas adinteladas decoradas con motivos de estilo "Rocaille". Tiene una puerta blasonada y, arriba, un balcón con balaustres de piedra que sirven de protección a la puerta del piso principal. La fachada sur tiene una doble terraza con arcos de medio punto y una escalera original. También destaca la capilla de la invocación de San Bernardo.
La fachada del edificio cuenta con una división en dos expedientes distintos, el primero por tener varias ventanas y puertas escalonada en torno a un cuerpo vertical central, mientras que el segundo destaca por tener varios ventanales, con barandillas de hierro fundidos.
Construido en el siglo XVIII, este palacio fue reformado en el siglo XIX. Los jardines han cambiado con la instalación del parque zoológico, no teniendo, sin embargo, perdió su interés. El jardín convierte en dos terrazas, con flores bordadas del boj.