Capilla barroca de planta longitudinal y frontispicio interrumpido. Fue construido en el siglo XVIII y sufrió reformas en el siglo XX. En el interior destacan algunas pinturas barrocas y lienzos enmarcados en madera dorada en los techos de la nave.

Iglesia manuelina y neomanierista de planta longitudinal y de una sola nave, construida en el siglo XVI, ampliada en el XVIII y restaurada en el XX.

Espacio compuesto por tres salas de lectura, una sala multimedia y una zona de estudio. Posee un vasto fondo documental.

Espacio muy agradable que ofrece magníficas vistas al mar y a las colinas vecinas. Tiene unas bancas donde podrás descansar y disfrutar de la tranquilidad del lugar.

Capilla compuesta de nave rectangular y cabecera, con campanario y sacristía. La nave está parcialmente cubierta con azulejos tipo alfombra de finales del siglo XVII.

Iglesia compuesta de nave rectangular y cabecera, con sacristía y campanario. Destaca el estilo rococó basado en las líneas exteriores del edificio.

Capilla barroca de sencilla planta rectangular. Presenta un retablo dorado y mármol y un techo con pintura policromada rococó.

Iglesia barroca de nave rectangular y cabecera, sacristía, campanario y anexo. Su interior es muy rico en decoración dorada.

Pintada de blanco, esta capilla cuenta con una mampostería prominente y bien conservada. En la fachada principal destaca la pequeña hornacina situada encima de la puerta principal, donde se encuentra una escultura en piedra de San Pedro. Esta hornacina de arco de medio punto está coronada por una cruz almohadillada y flanqueada por rosetones de mampostería. El interior es espacioso y deslumbrante por su buen ambiente, riqueza, arte y profusión de tallas barrocas, incluido el magnífico altar mayor con columnas retorcidas, volutas, ángeles, amorcillos y adornos vegetales. El techo con paneles (de madera) del presbiterio está decorado con treinta y …

Se trata de un horno cerámico de época romana, que consta de dos cámaras superpuestas separadas por una parrilla perforada, con cuatro arcos de ladrillo que sostienen la parrilla de la cámara de cocción. Los productos de cocina se colocaban sobre la parrilla, que luego se remataba con una bóveda con chimenea, para evacuar los gases y humos, de los que sólo quedan vestigios. La cámara está precedida por un corredor de horno con paredes de ladrillo inclinadas hacia el centro y base de losa. La boca del horno está formada por piedras colocadas verticalmente. La bóveda con reja y …